viernes, 24 de mayo de 2019

Encuentro


La estación de autobuses desaparece
cuando tus  ojos me roban la mirada.
De repente
tus pestañas me cubren
y mis labios se adelantan a tu boca.
Tu piel
se cuela hasta mis muslos
donde aguardo la savia de tus besos.

De repente
tus brazos aprietan mi temblor
una coreografía urgente, violenta
un tsunami.

De repente.
Ya no puedo escapar.