Con los sueños anudados
estornudo el aire preso de la noche.
A tragos llega la madrugada.
Un olor tostado se pega
al cuello de mis bostezos,
venero este nido caliente
entre las palmas de las manos
y permanezco muda
como una moneda en la fuente verdosa
gozando la soledad de este sorbo
como una moneda en la fuente verdosa
gozando la soledad de este sorbo
de penumbra.
Por la ventana entra
Por la ventana entra
un fino encaje de luz
hasta el borde de los ojos,
se mueve en silencio, dócil
como el titubeo de una cortina.
En la estancia reptan las sombras
como escuadrones de espejos
agazapados.
Un sosiego vela esta coexistencia
hasta que el sol
Un sosiego vela esta coexistencia
hasta que el sol
irrumpe con su néctar redondo y tajante
provocando con descaro la mañana.
Marchita de luz la noche,
Marchita de luz la noche,
se vuelve, poco a poco
a la alcoba fría.
Bella mirada del despertar. Imágenes poderosas que me arrastran dentro de tus sentimientos.
ResponderEliminarY tú siempre cerca. ! Qué gusto!
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